domingo, 3 de mayo de 2020

HOMENAJE A LA MADRE






MADRE MÍA







No me gustan demasiado los días dedicados a esto o a lo otro, sobre todo cuando más por cuestión de márquetin que de otra cosa tratamos de homenajear algo tan importante como la figura de una Madre, para mí el eje primordial alrededor del que se mueve la vida de la Familia. Una Madre, una mujer, pues solo ellas tienen ese privilegio, merece el reconocimiento diario.
Las religiones están hechas y pensadas por Hombres y para los Hombres, sobre todo la católica que reserva el papel principal a su figura. Así Dios es Hombre, su hijo es Hombre y el Espíritu Santo una Paloma, solo se reserva a la Mujer la función de ser fecundada por este último y se le regala una vida llena de Entrega y Sacrificio, donde no cabe la queja ni el protagonismo.
Con esas premisas, la principal oración de esta Iglesia se dedica al Dios Hombre y Padre. Me rebelo contra eso y hoy quiero compartir con todas las mujeres, no el Padre Nuestro sino la Madre Mía.
Feliz día y mi reconocimiento a todas las Madres y a esas Mujeres que algún día pueden serlo.

Madre Mía

Madre mía que estás siempre conmigo
venerado sea siempre tu nombre
Estés con nosotros o en tu Cielo
Cúmplanse tus deseos
Para ti y los tuyos.
Danos hoy tu abrazo de cada día
Perdonamos cuando te ofendemos,
así como nosotros nos arrepentimos.
Juntos o en el recuerdo,
piensa que te queremos.
Vela por nosotros,
siempre agradecidos
Porque para una Madre
Solo puede haber cariño
Nunca, nunca,  olvido. 

Matías Ortega Carmona

03/05/2020