jueves, 9 de diciembre de 2021

 

 

CUENTO DE NAVIDAD

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VER CON EL CORAZÓN

 

 

 


El invierno está siendo más frío de lo habitual en estos contornos. Pocas veces tenemos la oportunidad de ver la nieve tan cerca de la Ría pero hoy amaneció con las montañas de la otra orilla ligeramente teñidas de blanco. Es víspera de Navidad y parece que ésta va a ser de las que se narran en los cuentos y claro, si es así, la nieve debe de estar presente aunque sea de una forma tan superficial.

No solo esa ligera nevada hace diferente esta Navidad, hay otras novedades que son posibles cuando uno es capaz de “Ver con el Corazón”

-      Abuelo ¿Qué es ver con el corazón?, me pregunta mi nieta Irene.

-      Reina, ver con el corazón es vestir lo que vemos con los ojos de emociones, de sueños, es viajar por ese paisaje que tenemos delante llevados por nuestros sentimientos.

-      Ah, ya sé, comenta mi otra nieta, Paula. Es como cuando tú, Abuelo, nos haces magia. Cuando acaricias nuestra oreja y yo no lo veo pero sé que en tu mano aparecerá una chocolatina.

-      Algo así, mi querida Paula, pero dime ¿para ti dónde está la magia?

-      En tu mano, Abuelo, cuando tocas mi oreja y en la chocolatina que aparece ¿no es así?

-      Si, si así lo sientes. Pero para mí la magia está en vuestra sonrisa y en la alegría que reflejan vuestros ojos y en ese abrazo con el que me premiáis.

La conversación tiene lugar en mi estudio de esa casa que las Meigas, esas Brujas convertidas en Hadas, dotaron entre otras cosas de un Pino Mágico que hace las delicias y llena de emoción tanto a mis nietas como a su prima Nuria, cuando después de que lo rieguen les da sus regalos. Curioso Pino que solo entiende de niños pues ningún adulto ha conseguido, por mucho que lo haya regado, ningún regalo.

Está anocheciendo, el día se apaga y yo, como tantas otras veces, me quedo ensimismado mirando como al otro lado de la Ría van apareciendo luces, unas en movimiento, las de los vehículos que circulan por la carretera que bordea el mar y otras fijas, las de los hogares a los que quizás se dirigen esos vehículos.

Ahora es mi nieta Irene la que llama mi atención:

-      Abuelo ¿Qué miras?

-      No miro, Irene, veo.

-      Entonces, cómo nos decías, ¿miras con los ojos y también con el corazón?

-      Así es, Reina.

-      Yo veo el mar, la luna que se refleja en él, las luces que se mueven pero ¿puedo ver más cosas, abuelo?

-      Seguro que sí, deja que tu corazón vea también. Te diré lo que veo yo. Habitualmente veo en esos coches que se mueven, personas que regresan después de un día de trabajo a sus hogares. Veo que están cansados pero llenos de ilusión porque saben que al llegar encontrarán a su familia y el calor de una sonrisa y un abrazo, sobre todo de sus hijos y en algún caso de sus nietos.

-      ¿Sabéis, mis queridas niñas, qué día es hoy?

-      Si Abuelo, contestan a dúo, es Nochebuena y haremos cagar el Tió ( ese tronco con cara y ojos, típico de Cataluña, que después de haber sido alimentado durante muchos días, a base de bastonazos, irá soltando sus regalos)

-      Muy bien, les digo, pues hoy no veo en ese paisaje frente a nuestras ventanas, coches con gentes que regresan a sus hogares. Hoy esas luces que se mueven son las de las antorchas de los Pastores que se alumbran camino del Pesebre. Pero no hay un solo Pesebre porque cada hogar tiene uno y no hay un solo Niño Jesús porque, como Dios lo puede todo, Jesús se ha multiplicado y se ha metido en el corazón de todos los niños del mundo. Hacia ellos se dirigen esos Pastores para ofrecerles sus presentes. No todo serán cosas caras y vistosas pero veo que todos los niños van a recibir el regalo más preciado, el de más valor, ese que no se compra con dinero, el abrazo y el cariño de sus familiares.

-      Abuelo ¿y para ti cual es el mejor regalo?

-   Para este abuelo no hay mayor regalo que sus nietas, vosotras sois mi futuro, vuestro cariño me mantendrá vivo aún cuando no podáis verme; veros felices hará que yo pueda seguir “Viendo con el Corazón” y disfrutando de la Navidad.

 


 Matías Ortega Carmona

Diciembre de 2021

 


martes, 28 de septiembre de 2021

¿ERA, O ASÍ LA VEÍA YO?




¿ERA, O ASÍ LA VEÍA YO?

 


 
¿Quién descifra esa nube? ¿Presagia tormenta o es el final de la misma? Difícil ¿no?
Solo quien hizo la fotografía puede descifrar el misterio. Así como solo quien lo vivió  puede explicar ...su verdad. Todo está sujeto a los ojos que lo miran, todo está sujeto al corazón que lo siente.
Hoy, cosas que suceden casi a diario en la convivencia familiar, en la vida de pareja, me hacen sentirme especialmente meláncolico. Me llevan, me han llevado tantas veces, a recordar aquel amor de juventud que supuso un despertar a la vida. Cuando todo es ilusión, cuando todo es alegría, cuando vivir es mirar sus ojos, su sonrisa, cuando un beso en sus labios trémulos no tiene que ver con el deseo pero si con la pasión. Cuando no te imaginas la vida sin ella y el roce de su mano, la caricia robada en la oscuridad de aquel cine, en la penumbra del rellano de la escalera, temiendo que la puerta se abra y aparezca alguien, cuando todo eso para el tiempo y no existe nada, solo ella.
Pero llega un momento que las nubes cambian y realmente llega la tormenta, la vida se apaga, predominan las sombras. Dolor, sufrimiento y la sonrisa languidece, desaparecen los besos y llega la distancia, nunca el olvido. Se sobrevive, se sienten otros amaneceres y se sigue existiendo sin que nada sea lo mismo. Se intenta y en momentos parece que se consigue; cuando no es así aparece el recuerdo y aquella sonrisa, aquel beso, aquellos ojos, te iluminan, te dan fuerzas, vuelves a sentirla y sigues caminando. La sigues recordando y te preguntas... ¿Era así, o así la veía yo?

Matías Ortega Carmona

Un día de esos




 

miércoles, 24 de febrero de 2021

HOMENAXE A ROSALÍA



HOMENAXE A ROSALÍA DE CASTRO

 


Hoxe, 24 de febreiro, conmemórase o nacemento da máis Ilustre Dama das letras galegas. O seu legado vive máis que nunca en todos os que amamos Galicia e a Literatura. Quero unirme ás moitas homenaxes que hoxe se lle fan a Rosalía de Castro cun modesto poema:

 

Crónicas de Carnoedo

Sentado, desde a miña horta,

gozo mirando a Ría.

O ceo está cuberto

e a tarde é algo fría.

Vexo pasar os veleiros

que, empuxados pola bresa,

navegan máis que lixeiros

e, digo eu…Por que tanta présa?

As lanchas nas bateas

cargan o mexillón,

ese froito das mareas

que vai destino ao fogón.

A Lourido chegan os pescadores

que a lura van pescar,

hoxe o día non foi do mellores

pero así son as cousas do mar.

Oio  tanxer a campá,

avisando aos veciños

que a igrexa os reclama

e, aló van, polo camiño.

Hoxe, como cada día,

é a misa dalgún parente

ao que se lembra aínda

por ser ¿como non? boa xente.

Os que non foron  ver ao cura

rezan na taberna 

que, co viño que pon Pura,

a misa é máis moderna.

E eu sigo mirando, atento,

buscando historias que contar.

Unhas veces inspírame o mar,

outras, conto o que sinto.

 

Matías Ortega Carmona

 

 

 

lunes, 1 de febrero de 2021

100000 GRACIAS

 

 

  

100000 GRACIAS

 

LEYENDA DE LA TORRE DE HÉRCULES - GERIÓN 

 

 

 

 

OSADOS EMIGRANTES

 


Primera y última publicación de mi Blog, entre ambas 100000 Visitas recibidas en el  mismo. Sé que a algunos esta cifra puede parecerles insignificante, teniendo en cuenta que con el auge de las redes sociales vemos a menudo que auténticas burradas, lo digo con todo convencimiento, tienen más de un millón de visualizaciones en pocos días. Aún así estoy satisfecho, pues mi Blog no ha tenido ningún tipo de promoción, más allá de lo compartido con mis contactos y amistades, y tampoco he querido, para buscar mayor promoción, que quienes visiten mi Blog tengan que compartir las publicaciones con anuncios.

Encabezando el ranquin de visitas a mis publicaciones figura la Leyenda de la Romería de Aranga: 

https://matiasortegacarmona.blogspot.com/2014/05/romeria-de-aranga.html


Cierra esta "clasificación" con menor número de visitas recibidas (también es de fecha más reciente), una publicación escrita con mucho cariño y llena de sentimiento, que recuerda a aquellos que no vemos pero siguen con nosotros en nuestro corazón, llamada Nunca te fuiste:
 
https://draft.blogger.com/blog/post/edit/7268073068942918008/3588126999423019285
 
 
Acompañando a estas publicaciones que he citado, otras muchas dan vida a este Blog en el que he dejado mucho de mí. Relatos, una novela, poemas, crónicas viajeras, múltiples fotografías y algunos videos son una labor que he desarrollado, sobre todo desde mi jubilación, que ha resultado muy gratificante y fructífera. Nunca había imaginado que también llegase a ser tan extensa. Para que eso haya sucedido, ha sido muy importante ver que lo que modestamente creaba os interesaba a algun@s. Por ello vuelvo a repetir lo mismo con lo que he encabezado esta, por ahora, última entrada de mi Blog:

100000 GRACIAS
 
 

 

 

martes, 27 de octubre de 2020

POEMA - OSADOS EMIGRANTES





OSADOS EMIGRANTES

 

 

Osados emigrantes

 

Vivíamos en nuestra torre de marfil.

Pretendiendo que ese era el mundo real.

Lejos del hambre,  la miseria y enfermedades,

propias de gentes oscuras, sin civilizar,

con un único patrimonio, sus calamidades.  

Un día llegamos hasta ellos y les colonizamos,

no para ayudarles a subsistir y modernizarse,

sino con la avaricia de expoliar su riqueza.

Algunos, aprendieron lo peor de nosotros,

de oprimidos pasaron a ser opresores,

Reyes del expolio, tiranos y dictadores.

Sembraron sus países de odios y pobreza.

Guerras por doquier, hambre y sufrimiento.

Los países “avanzados”, sus antiguos mentores,

les hablaban de la necesidad de Paz

mientras,  por la puerta de atrás,

hacían negocio con la venta de armamento.

Cuando algunos, huyendo de esa tragedia,

abandonaban sus países, por tierra o por mar,

nos parecía un desatino el poderles ayudar.

Oteábamos el horizonte, preocupados,

temiendo  que al final de su viaje,

con su  esperanza y sus ilusiones  como equipaje,

amenazasen nuestro mundo privilegiado.

La imagen de cuerpos heridos por las concertinas,

del hacinamiento en frágiles embarcaciones,

de naufragios con miles de víctimas,

no ablandaba nuestros corazones.

El cuerpo de un niño, ahogado sobre la arena,

pareció despertar nuestra conciencia,

pero ante las  desgracias, cuando son ajenas,

volvemos rápidamente a la indiferencia.

Podemos seguir creyendo que son cosas del pasado,

pero esas gentes que sufren y malviven, confinados,

son, forman parte nuestro presente.

Forman parte del Drama nunca abordado

por quienes nos llamamos civilizados,

son la triste realidad de un Mundo Indecente.

 

Matías Ortega Carmona

 

Octubre de 2020.