NOCHE DE AMOR
100000 GRACIAS
LEYENDA DE LA TORRE DE HÉRCULES - GERIÓN
OSADOS EMIGRANTES
Primera y última publicación de mi Blog, entre ambas 100000 Visitas recibidas en el mismo. Sé que a algunos esta cifra puede parecerles insignificante, teniendo en cuenta que con el auge de las redes sociales vemos a menudo que auténticas burradas, lo digo con todo convencimiento, tienen más de un millón de visualizaciones en pocos días. Aún así estoy satisfecho, pues mi Blog no ha tenido ningún tipo de promoción, más allá de lo compartido con mis contactos y amistades, y tampoco he querido, para buscar mayor promoción, que quienes visiten mi Blog tengan que compartir las publicaciones con anuncios.
Encabezando el ranquin de visitas a mis publicaciones figura la Leyenda de la Romería de Aranga:
https://matiasortegacarmona.blogspot.com/2014/05/romeria-de-aranga.html
OSADOS EMIGRANTES
Osados emigrantes
Vivíamos en nuestra torre de marfil.
Pretendiendo que ese era el mundo real.
Lejos del hambre, la miseria y enfermedades,
propias de gentes oscuras, sin civilizar,
con un único patrimonio, sus calamidades.
Un día llegamos hasta ellos y les colonizamos,
no para ayudarles a subsistir y modernizarse,
sino con la avaricia de expoliar su riqueza.
Algunos, aprendieron lo peor de nosotros,
de oprimidos pasaron a ser opresores,
Reyes del expolio, tiranos y dictadores.
Sembraron sus países de odios y pobreza.
Guerras por doquier, hambre y sufrimiento.
Los países “avanzados”, sus antiguos mentores,
les hablaban de la necesidad de Paz
mientras, por la puerta de atrás,
hacían negocio con la venta de armamento.
Cuando algunos, huyendo de esa tragedia,
abandonaban sus países, por tierra o por mar,
nos parecía un desatino el poderles ayudar.
Oteábamos el horizonte, preocupados,
temiendo que al final de su viaje,
con su esperanza y sus ilusiones como equipaje,
amenazasen nuestro mundo privilegiado.
La imagen de cuerpos heridos por las concertinas,
del hacinamiento en frágiles embarcaciones,
de naufragios con miles de víctimas,
no ablandaba nuestros corazones.
El cuerpo de un niño, ahogado sobre la arena,
pareció despertar nuestra conciencia,
pero ante las desgracias, cuando son ajenas,
volvemos rápidamente a la indiferencia.
Podemos seguir creyendo que son cosas del pasado,
pero esas gentes que sufren y malviven, confinados,
son, forman parte nuestro presente.
Forman parte del Drama nunca abordado
por quienes nos llamamos civilizados,
son la triste realidad de un Mundo Indecente.
Matías Ortega Carmona
Octubre de 2020.